Tuesday, July 19, 2005

Leo porque...

Arturo Victoriano en su Blog El Clavel que se deshoja pregunta
porque leemos?
escribe - "¿Por qué leen?"

"Si es que leen libros, la misma pregunta se puede hacer acerca de la música o las películas que consumen. Aunque para algunos de nosotros el acto de leer no se limita a los libros solamente, leemos las canciones y las películas, en fin leemos textos."
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mi respuesta instintiva:

Leo porque escribo, escribo porque leo
leo porque desde que recuerde, me fascinan las palabras, las letras, osea, ver como se puede construir un mundo en base a juntar palabras.
porque la composicion de esas mismas palabras en una obra que te pone a volar, que te desgarra, te saca lagrimas, te engranoja, es tal vez prueba de que somos mas que carne y sangre.
porque las voces en la cabeza a veces necesitan conversacion de fuera.
Leo porque me gusta aprender, porque me gusta viajar, porque me gusta.
Escucho musica porque me da vida.
Leo y escucho musica porque mi mente no conoce el silencio y le teme a la soledad.
y cuando no estoy leyendo, ni escuchando musica, ni viendo tele, ni mirando por una ventana...
entonces mi alma escribe, mi mente sueña, mi corazon canta...
siempre huyendole al silencio, porque el silencio tendra su tiempo... inevitable.

9 comments:

JB said...

Creo que has respondido mejor que nadie a esa pregunta! jeje

Pero no siempre hay que escaparle al silencio... pues este algunas veces nos puede decir cosas increibles.

Me gustó tu blog.
Saludos n_n

Chelle said...

escribes muy bonito.

sin embargo, aprender a estar en silencio es una bendicion. cuando uno aprende a llenar el vacio que teme enfrentar, se da cuenta que el silencio es mas lleno que el ruido. luego uno aprende a valorar mas estos momentos en intimidad con uno mismo. (para eso existen tecnicas como la meditacion.) pero el silencio no es solamente callar por fuera, sino tambien adentro- y eso muy lejos de ser similar a la muerte, es un espacio donde uno reafirma y aprecia mas la vida.

y luego, en los momentos de palabras y sonidos, tambien estos se disfrutan mejor.

ademas, la muerte como tal no existe. es solo un cambio, pero seguira uno consciente y con pensamientos y todo, solo que por un tiempo, sin cuerpo fisico. no hay nada que temer...

bueno, fue un placer pasar por aqui.

Yde said...

Porque leo, porque vivo, porque ansio, porque todo se compone de palabras, escritas, habladas, dibujadas, leo porque existo. Pero claro, tengo que admirar tu post, es fantastico.

Wasarry said...

A mi parecer la lectura es la "limpia" del alma, mucho mas para nosotros los pobres jovenes que estamos sumidos en la desgracia de la falta de personalidad (incluyendome en determinados casos claro esta). A veces un rico helado de Uva de playa con un buen libro de Bukowsky puede acer milagros en uno Maestro Leo...Say nO More..

W.

Anonymous said...
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Anonymous said...

Leo por que leer puede crear mundo y por que el no leer puede destruirlos ( aunque a veces el leer puede ser el destructor).

Tremenda reflexion y muy buen enfoque del asunto... Te felicito...

Ahora, si me hicieras un favor, entra a mi link y dejate una Huella (comment) para mi seria un Honor y un placer leer lo k piensa un genio como tu acerca de mis humildes escritos , si no te gustan , a confianza mandalos a la Mie"$·...

Say No More...

HD.
05

victortejada said...

Ok, Sabina dijo alguna vez, Que el lugar donde has sido feliz no devieras tratar de volver. Porque vuelves al esenario con Tony Almont. Cambiaras?

victortejada said...

En la ciudad de los muertos, donde crecen amapolas,
las mujeres tienden ropa sobre lápidas sin nombres,
los niños entre las tumbas juegan a salvar sus vidas
y se esconden de otros niños, del hambre o de escuadrones.
La ciudad de los muertos ya de mañana agoniza
y no hay quien les represente en las Naciones Unidas.
En todas las ciudades se habita un cementerio
donde se exilian los muertos.

En la ciudad de los muertos no se para el autobús,
cuando la parca se duerma el muerto cenará sin luz.
Un muerto que tirita porque allí siempre es invierno,
te ofrece un cigarrillo, te invita a su mausoleo.
Nadie les tiene en cuenta en el plan nacional,
ni al hacer las estadísticas del Banco Mundial.
En la ciudad de los muertos talaron todos los sauces,
es terreno edificable.

La ciudad de los muertos está rebosando vida
y óxido todas las puertas, la alambrada que lo cerca.
El latido de los muertos ha cruzado la autopista
y está acechando tu casa, quiere sentarse en tu mesa.

Los muertos tan vivos habitarán los palacios,
las calles y ministerios, y los Fondos Monetarios.
De carne y luz de otros tiempos vistieron sus esqueletos,
cansados ya de estar muertos,
de habitar tu cementerio.

GISOFANIA said...

He aquí que leo y escribo para no volverme loca, para no dejar de estar conectada con todo. De otro modo sería la muerte. Y el silencio tiene su inevitable tiempo, como vos decís.

Tengo la dicha de conocer y disfrutar tu música, querido Leo (tan lejano, tan cercano), y ahora se completa el círculo mágico: emocionarme en la frescura de tus amadas palabras.

Abrazos calaqueños desde Santa Fe, Argentina.